Lamentable tragedia. Luego del traslado de la institución de educación médica al Recinto de Ciencias Medicas, tanto el Capitolio como el Departamento de Recursos Naturales se apropian del edificio. Demostrando su sabiduría legislativa, estos levemente dañan su fachada. Pero, la ocupación podría ser cuestionada desde otro punto de vista, ademas del moral que implica su tradicional descripción. Podemos preguntar: ¿es un edificio apto para tales propósitos? El asunto es analizado en el libro.